ESTILO TRENDY
Por Andrea del Río, Editora de Clase Ejectuvia, El Cronista
Vuelven los camisacos estilo safari, bien marcados a la cintura, con muchos bolsillos y martingala. Vuelven las remoras de corte irregular, de un solo hombro, con estampados animal print, floral o símil pincelada. Vuelven los maxivestidos onda túnica, los vestidos envolventes (drapped) atados a la espalda, a la cintura, bajo el escote. Vuelven las faldas en versión extra large y extra small. Vuelven los antalones harem, los de sastrería masculina, los que llevan lazo a la cintura, los de tiro un poquitín más arriba de la cadera, los de corte cargo. Vuelve la chaquetita Chanel a la cintura, la campera de cuero ligero (oveja), el trench de gabardina.
Vuelve la gasa, el crochet, el modal, la raffia, el satén. Vuelve la monoprenda, el mono, el overol, el enterito. Vuelve la paleta pastel, el caqui, el rosa viejo, el azul marino. Vuelve el jean: en cualquier color, en cualquier textura (aunque el look roto-grunge hará furor), en cualquier corte, en cualquier combinación.
Vuelve (habráse visto) el combo jean con jean. Vuelven los vestidos solero, los liberty, los bobo. Vuelve la lencería like a virgin: enaguas, camisolines, corsés, sutienes y bustieres... todo a la vista.
Vuelve. Todo vuelve. Así lo resumió Florencia Bibas, style consultant y personal shopper que, esta semana, dictó un exclusivísimo seminario de imagen en el InterContinental. En coincidencia con la celebración de la edición springsummer del BAF Week, que esta noche concluye en La Rural, Bibas caracterizó las tendencias que se vienen en cuatro categorías: nude (predominio de siluetas amplias y envolventes, texturas etéreas, colores aquarelle), geo-tribal o new safari (reivindicación urbana de la naturaleza a través de tonos caqui e inspiración exploradora, explicitada en chaquetas y pantalones con bolsillos funcionales y lazos que marquen sin ajustar), campesina+lolita (enfatizado por íconos como las maxifaldas, los zuecos tiroleses, los vestiditos ingenuos, las carteras de yute), vintage-lencero (abrevando en el imaginario de burdel, se imponen los detalles de lencería exhibidos pizpiretamente).
Se usa todo, ha quedado dicho. Desde luego, cada una sabrá cuánto aventurarse en cada estilo. No por sensate el consejo fundamental de Bibas déjà de ser indispensable: considerar el cuerpo (morfología, estructura, proporciones) en la misma medida que la ocasión de uso. El secreto para que la moda no incomode.
13-08-2010
